Ahora somos muchos los que vamos de veraneo a los pueblos de nuestros padres y abuelos y en ellos vuelve la vida y la actividad, pero la realidad es que cada vez hay más pueblos abandonados o con contados habitantes. Ante unos datos así:
- España tiene el doble de ayuntamientos que Francia, teniendo en cuenta además que Francia tiene aproximadamente un 20% más de territorio y un 50% más de población. Y sin olvidar que Francia es uno de los países más intervenidos y burocratizados del mundo
- En España hay 8.112 ayuntamientos, y 4.861 de ellos tienen menos de 1.000 habitantes. Son el 60% del total de ayuntamientos españoles.
- Este 60% de ayuntamientos con menos de 1.000 habitantes cubren únicamente el 3,2% de la población española.
- Únicamente el gasto en personal de estos ayuntamientos se lleva entre el 20% y el 40% de su presupuesto total.
Cuantos más ayuntamientos existan, habrá más "concejalitos" para cualquier chorrada que al alcalde se le ocurra. Cada ayuntamiento está dividido en decenas de departamentos, cada uno con su concejalito y su consejerito, cuando a lo mejor cada uno podría desempeñar las funciones de seis o siete departamentos.
Ahí tenemos las diputaciones provinciales, básicamente como elemento decorativo, pero por supuesto con sus carguitos, sus diputaditos, sus departamentitos, etc.
Después nos sorprendemos que casi 500 ayuntamientos estén en quiebra prácticamente.
Las asignaciones locales que tienen los ayuntamientos pequeños pueden transferirse íntegramente a las Diputaciones Provinciales o a las comarcas y las mancomunidades comarcales que les permitan ahorrar en inversiones, actuando estos entes públicos como los encargados de la dirección política, económica y social de los municipios que tengan bajo su circunscripción.
La aplicación de economías de escala en la gestión de los servicios municipales con la creación de empresas mixtas de capital público-privado o la privatización directa de la mayoría de los servicios públicos a niveles supralocales lograría la eficiencia en el tratamiento y gestión de los recursos públicos.
- Los municipios pequeños tendrán acceso a servicios que actualmente no tienen o son altamente deficitarios si los llevan a cabo.
- Se adelgazaría tremendamente la estructura de empleados públicos a cargo de las administraciones locales.
- Los niveles de corrupción local disminuirían drásticamente, porque no serían necesarios tantos concejales ni se harían los desmanes que se llevan a cabo actualmente en áreas como Urbanismo o concesiones municipales a dedo.
- Se adelgazaría sustancialmente en todos los recursos duplicados, incluidos excesos en personal laboral y funcionarial de las administraciones locales.
Otros países europeos ya hicieron sus deberes, de forma voluntaria o forzosa, establecieron límites demográficos y de superficie. El recorte hizo que en Suecia se pasase de 2.281 municipios a 286 (-87%) en los años 90, Dinamarca redujo el 80%, Reino Unido el 76% y el más reciente Grecia lo hizo en Mayo pasando de 1.034 a 355, reduciendo un 66%, que supone un ahorro de 1.185 millones de euros anuales para el país.
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